El endometrio es una capa de tejido que recubre el interior del útero. Cada mes el endometrio se prepara para la llegada de un embrión. Cuando esto no se da, se produce la menstruación.

Para que el proceso de implantación se lleve a cabo es necesario que exista un “diálogo” entre el endometrio y el embrión. Esta comunicación es posible gracias a “señales” que emite el endometrio cuando es receptivo.

Muchos ciclos de FIV dan como resultado el fracaso de la implantación, incluso con embriones de buena calidad. Aunque un embrión listo para implantar es el mejor punto de partida, la receptividad endometrial es fundamental para que la implantación tenga éxito. El endometrio es receptivo cuando está listo para la implantación del embrión. Este período de receptividad se denomina ventana de implantación.
Cada mujer tiene una ventana única, generalmente entre los días 19 y 21 del ciclo. Conociendo su ventana de implantación, se pueden optimizar sus posibilidades de embarazo mediante una transferencia de embriones personalizada.